Josean Aparicio Tercero. Molina de Aragón (Guadalajara), 1962. Como título a su bitácora puso una frase que podría definir su trayectoria: buscador de espacios sin conquistar. Ya desde muy joven, cuando vivía en su pueblo natal, pretendía esos espacios, soñando con una especie de retorno a la naturaleza. Tal vez por eso probó algunas formas de vida que ya en aquel momento eran consideradas un tanto idealistas, como vivir en una comuna. Tal vez por eso comenzó a escalar paredes verticales y montañas, a explorar parajes agrestes y a planear grandes viajes, y tal vez por lo mismo comenzó también a escribir.<BR>Siempre encontró en la lectura no sólo un entretenimiento o una forma de evasión, sino también una especie de complicidad. Al principio escribe, como suele ser habitual, para sí mismo. Los viajes y las innumerables anécdotas que le han ido sucediendo por culpa de un carácter inquieto han sido una fuente de inspiración en casi todos los relatos. Quizás también se vean reflejados en ellos sus tendencias hacia todo eso que llamaron utopías.<BR>Dedicado a sus pasiones, entre las que habría que destacar la literatura y los viajes, esos viajes con la mochila al hombro de los que ha sacado una buena parte de sus relatos. En varias ocasiones, ha sido finalista en concursos de ámbito internacional. Todos esos relatos, y otros tantos, se agrupan en esta antología que ahora se presenta.