La llamada descolonización española del Sáhara o el simple abandono del territorio por España a finales de 1975 constituye un episodio histórico que permanece sin explicar del todo. Existen lagunas que la historiografía tiene la obligación de llenar y, poco a poco, lo va haciendo. Pero quedan aspectos no aclarados, conductas sospechosas, desviaciones de la doctrina oficial y posturas públicas opuestas a las privadas de algunos de los protagonistas del asunto. La versión oficial, más o menos aceptada, de que la agonía de Franco fue aprovechada por el rey Hassan para adueñarse de un territorio en proceso de descolonización, tiene muchas fallas y piezas que no encajan. Lo que parece claro es que las negociaciones no fueron todo lo limpias y honorables que nos han contado. El rey Hassan había decidido invadir el territorio mediante una Marcha Verde. En esta tela de araña aparece la figura del coronel Rodríguez de Viguri, militar de carrera que regresó al Sáhara en 1974 como secretario general del Gobierno del territorio aunque, tras la dimisión de Gómez de Salazar, paso a ser el gobernador en funciones. El último gobernador colonial español en África.