Si examinamos la contribución de Zizek al pensamiento contemporáneo, esto tiene la apariencia de una película de David Lynch. Y esto no porque Zizek se refiera a menudo a Lynch para elucidar sus postulados teóricos, sino porque comparten una misma forma de materialismo. Es de todo conocido que Zizek está casado con la filosofía hegeliana, el psicoanálisis lacaniano y la política marxista, pero en esta amalgama quien ocupa el lugar de honor es Hegel. Solamente permaneciendo dentro del campo del pensamiento y no recurriendo a ninguna condición material externa descubre uno la materialidad como causa de subjetividad. Así, Zizek elige al psicoanálisis lacaniano y la filosofía de Hegel como su piedra de toque filosofal por la misma razón que privilegia a Lynch como cineasta. Ambos apuntan en dirección de un nuevo materialismo.
AUTOR/A
ZIZEK, SLAVOJ
Slavoj ?i?ek es profesor en la European Graduate School, director internacional del Birkbeck Institute for the Humanities, Universidad de Londres, e investigador sénior en el Instituto de Sociología de la Universidad de Liubliana, Eslovenia.<BR>Entre sus obras más destacadas figuran: El acoso de las fantasías (1992) y El sublime objeto de la ideología (1999), publicadas en Siglo XXI de España; Repetir Lenin (2004), Bienvenidos al desierto de lo Real (2005), Lenin reactivado (2010) y En defensa de causas perdidas (2011), publicadas en Ediciones Akal.