Rosa Chacel, nacida en junio de 1898 en Valladolid, es autora de una de las obras más singulares de la literatura española, tanto en narrativa como en poesía y ensayo. Teresa, La sinrazón o Barrio de Maravillas son algunas de sus novelas más significativas, junto con Memorias de Leticia Valle. Destacan también el ensayo Saturnal y los cuentos reunidos en Icada, Nevda, Diada. Testigo de los grandes acontecimientos del sigo XX desde distintos emplazamientos, alternó su residencia entre Río de Janeiro y Buenos Aires de 1940 a 1972, año en que se establece en Madrid. Recibió el premio de las Letras Españolas por el conjunto de su obra en 1988 y el Doctorado Honoris Causa por la Universidad de Valladolid en 1989. Murió en Madrid a los noventa y seis años de edad. La capacidad para captar la atención de los demás y jugar con sus pasiones centra la narración de Leticia Valle, a punto de cumplir los doce años y recién descubierta una libertad que antes no tenía. A través de jirones de su memoria, Rosa Chacel traza un retrato magistral en el cual revela, en palabras de Andrea Jeftanovic, la sensualidad de una preadolescente y lo que esto supone para ella. Memorias de Leticia Valle es una novela bella e inquietante, en la que aquello que no se dice toma más fuerza que lo dicho.
AUTOR/A
CHACEL ARIMÓN, ROSA
Rosa Chacel Arimón (Valladolid, 3 de junio de 1898 - Madrid, 7 de agosto de 1994) Escritora española. A los nueve años va a vivir con su abuela materna a Madrid, en el barrio de Maravillas que años después glosará en su obra homónima. Su madre, maestra, le brinda la formación elemental en casa, a causa de la delicada salud de la niña. Chacel estudió dibujo con Fernanda Francés en la Escuela de Artes y Oficios de la calle de la Palma y en la Escuela del Hogar y Profesional de la Mujer e ingresó más tarde en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, que dejó en 1918. En ese momento comienza a vincularse con la bohemia literaria de los cafés madrileños: el Granja del Henar y la Botillería de Pombo, y también el Ateneo de Madrid.<BR><BR>Se casó en 1921 con el pintor Timoteo Pérez Rubio («Timo»), con quien tuvo un hijo, Carlos. Entre 1922 y 1927 residen en Italia, gracias a una beca obtenida por su marido en la «Academia de España» de Roma. En 1933 pasará seis meses sola en Berlín, superando la crisis creativa creada por la muerte de su madre.<BR><BR>En estos años formativos recibe la influencia de Proust y del Joyce de Retrato de un artista adolescente, pero también de Freud y Nietzsche. Entra en el círculo de Ortega y Gasset. Publica en la Revista de Occidente dos relatos (Chinina Migone, 1928, y Juego de las dos esquinas, 1929) y el ensayo Esquema de los problemas culturales y prácticos del amor (1931), y también en La Gaceta Literaria.<BR><BR>Al estallar la Guerra Civil Española, Pérez Rubio se alista y Chacel firma el Manifiesto de los intelectuales antifascistas, colabora con la prensa republicana y trabaja como enfermera. El agravamiento de la situación militar hace que se decida el envío al exterior de las obras del Museo del Prado, responsabilidad que se encarga a Pérez Rubio. Chacel y su hijo parten a Barcelona, Valencia y luego al exterior, a Francia, con una breve etapa en Grecia, donde son hospedados por Nikos Kazantzakis. Tras la caída de la República, se reúne la familia, trasladándose a Brasil, con breves estadías en Buenos Aires. Su exilio resulta poco prolífico en lo narrativo, aunque colabora con revistas y suplementos literarios y lleva a cabo traducciones del francés y el inglés. La situación económica de la familia es comprometida.<BR><BR>Su regreso a España tiene varias etapas, comenzando en Nueva York con una beca Guggenheim (1959?1961). La mejora financiera le permite volver a España, donde permanece hasta 1963. Un segundo viaje de promoción literaria tiene lugar en 1970. Se instala definitivamente en España en 1973 con una beca de la Fundación March para terminar Barrio de Maravillas, aunque viaja periódicamente a Río de Janeiro, y se afinca definitivamente tras la muerte de Pérez Rubio en 1977. Esta última etapa es la más fecunda desde el punto de vista literario.<BR><BR>Wikipedia