Contra el feminismo punitivo, herramientas para destruir la casa del amo.

La violencia sexual está siendo instrumentada para justificar dosis cada vez más altas de punitividad penal y es por ello que el feminismo tiene la responsabilidad de pensar estrategias políticas que no alimenten los sistemas de represión y castigo. Los efectos de la violencia sexual, dependen mucho de los significados que otorguemos a la sexualidad y al cuerpo femenino y de la creación de estos significados se ha encargado, con notoria eficacia, el sistema heteropatriarcal y sus normativas de género. La normativa hegemónica de género de la feminidad supone que las mujeres somos seres con una emocionalidad frágil y una sexualidad sagrada que solo se entrega en contextos de seguridad y afecto. Es necesario abordar y resignificar estas cuestiones si queremos proponer un feminismo emancipador que nos haga más libres.

Artículos recomendados

• Despentes, V. (2006) “Imposible violar a una mujer tan viciosa”. En Teoría King Kong. Editorial Melusina, pp.29-46
• Macaya, L. (11-06-18) “Contra el feminismo punitivo, herramientas para destruir la casa del amo”. En Catalunya- Plural, diario de derechos y pensamiento crítico.
• Macaya, L (29-01-20) “¡Con nosotras quien quiera! Sobre el caso Arandina”. En Tribunas y debates, firmas, Ctxt, contexto y acción.
• Lagarta Comunicación (2020, 28 enero) Entrevista a Clara Serra y Laura Macaya en TAGURI-Espacio de debate feminista crítico [Vídeo]